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Luz.



Es curioso... A escala microscópica, somos vacío. No somos nada. En realidad la materia está vacía. Si nos acercamos a nuestra piel, y avanzamos a escalas microscópicas el vacío se hace inmenso, casi total. Sin embargo nuestra vida, nuestro mundo, universo, sensaciones, nuestros problemas son bien reales.

¿Qué somos, materia o vacío?

Quizás somos luz encarnada, condensada. Luz cierta, a veces feliz, a veces sufriente, a ratos confundida o equivocada, y en otros nos reconocemos en esta esencia gozosa, simple, original.

Cuando estamos felices, parecemos emitir luz. La buena gente, es luminosa. Ilumina la vida de quienes le rodean. Regala amor y alegría. "Parece que emitas luz", decimos a quienes vemos prendidos por el regalo de la alegría, la plenitud o la emoción generada por un sentimiento elevado y amable. "Iluminados" se ha llamado a aquellos avatares que desde la sencillez desvelaron obviedades obviadas que tenemos bien cerca y que no vemos por falta de luz: aquí y ahora, ama y haz, no hagas al otro lo que no quieras que te hagan... Simplicidad, originalidad, esencialidad: luz.

Espero que esta semana te regale momentos luminosos e iluminados. Y si no vienen, podemos crearlos. A veces una chispa (de amor, de alegría, de creatividad, de sentido, de generosidad, de silencio, de comprensión, de paciencia...), puede cambiar una vida.



Alex Rovira.

Fuente: http://www.facebook.com/Alex.Rovira.Oficial?fref=ts



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