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Tus hijos.

Tus hijos no son tus hijos
son hijos e hijas de la vida
deseosa de sí misma.

No vienen de ti, sino a través de ti
y aunque estén contigo
no te pertenecen.

Puedes darles tu amor,
pero no tus pensamientos, pues,
ellos tienen sus propios pensamientos.

Puedes abrigar sus cuerpos,
pero no sus almas, porque ellas,
viven en la casa del mañana,
que no pueden visitar
ni siquiera en sueños.

Puedes esforzarte en ser como ellos,
pero no procures hacerlos semejantes a ti
porque la vida no retrocede,
ni se detiene en el ayer.

Tú eres el arco del cual, tus hijos
como flechas vivas son lanzados.
Deja que la inclinación
en tu mano de arquero
sea para la felicidad.



Khalil Gibran.




Comentarios

  1. Me encanta esa poesía, es preciosa, se la regalé a mi suegra para el día de la madre y se emociono mucho, ya que ella tiene 3 hijos en la tierra y 1 en el cielo.

    Un besito Pao!

    ResponderEliminar
  2. Verdades como templos, muy bueas reflexiones, vengo de parte de Ernesto que me ha dejado tu blog. muy hermos por cierto.
    Que tengas un día feliz.
    Saludos afectuosos.
    Leonor.

    ResponderEliminar

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A todo caminante que la vida trajo por aqui, le agradezco que deje su huella. Un abrazo!!!

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